Los talibanes en el gimnasio del palacio presidencial en Kabul dándole a los hierros
La verdad es que si no fuesen gente tan peligrosa la escena es muy cómica. Por cierto, ya vimos el otro día las 29 prohibiciones que los talibanes imponen a las mujeres.
Y después a los coches de choque
Aunque no creo que le gusten porque ninguno explota.